Ella, voz

A veces no quiero pensar. A veces quisiera dejar de escuchar la voz que está ahí, en el centro de mi cabeza. Casi puedo verla, tocarla, cuando se escucha demasiado fuerte, cuando no se calla.

Quisiera que se detuviera. Que se pusiera a pensar en sí misma, que por un momento dejara de intentar salvar a todos. Esperaría que no tuviera opiniones o que tuviera las propias sin estar asustada, estaría bien si no quisiera tenerlas y si quisiera callarse porque por un segundo, pensaría primero en ella.

Desearía que dejara de buscar cosas en su pasado para solucionar un futuro incierto. Desearía que se quedara en el presente por unos segundos, que guardara silencio, que solo mirara al cielo con sus cúmulos. Ellos que sólo pasan, que están listos, que no aguarda, como ella.

Me gustaría poder dejar de oírla, poder abrazarla, decirle que este momento no desaparece y estamos bien.

Escucha, estamos bien.

Estamos bien.

Estamos.

Es suficiente.

Campo de flores en noche estrellada. A la espera de que algo se acerque. Pintura de acrílico sobre papel.